Un hecho de inseguridad dejó al descubierto los excesos que se cometen en El Mollar durante las vacaciones. Dos jóvenes fueron procesados por la Justicia por haber hurtado pertenencias de la propietaria del camping donde estaban instalados. Además, los sospechosos se trasladaban en un vehículo que tenía pedido de secuestro por haber sido robado meses atrás.
El jueves por la noche, la dueña del camping Natalia Lorena Chadut había dejado su auto estacionado en la calle. Dos jóvenes amigos, de 22 y 18 años, que estaban pernoctando en el lugar, salieron y lograron abrieron el vehículo y le sustrajeron los elementos que había en su interior.
La víctima, después de descubrir lo que había sucedido, se dirigió a la comisaría de El Mollar para denunciarlos. Al llegar al camping descubrió que los acusados se habían marchado después de enterarse lo que había sucedido. Huyeron en un VW Gold Trend.
El jefe de la comisaría de esa localidad, Daniel Tejeda informó que se montó un operativo cerrojo para dar con los acusados. Los uniformados, dirigidos por el oficial Eduardo Bazán, lograron detener a los sospechosos en un control vial que se desarrollaba al frente de la estación de servicio que se encuentra sobre la ruta 307, en La Angostura.
Al requisar el auto en el que se trasladaban, los policías encontraron las pertenencias de la mujer que había sufrido el robo. Paralelamente comenzaron a averiguar si el vehículo estaba en regla. A los pocos minutos les confirmaron que el Gol tenía pedido secuestro porque había sido denunciado por robo el lunes pasado en Yerba Buena. “Al parecer, sustrajeron el vehículo para trasladarse hasta esta localidad. No se descarta tampoco que lo hayan sustraído para seguir cometiendo delitos”, destacó Tejeda en una entrevista con LA GACETA.
Los aprehendidos fueron presentados ayer en la fiscalía de Monteros. La Justicia ordenó que el mayor continúe detenido, mientras que el menor quede en libertad, pero se le abrió una investigación por encubrimiento. También se ordenó una serie de allanamientos para determinar si los sospechosos cometieron otros robos en la villa turística.
Más operativos
Tejeda confirmó que se está trabajando intensamente para poner punto final a los excesos de los jóvenes que se producen entre los viernes y los domingos, días en los que se concentra la mayor concurrencia.
Hace décadas, el Mollar se transformó en uno de los destinos elegidos por los jóvenes para vacacionar. La mayoría de ellos lo hacen en grupos y sin la compañía de adultos. Asisten a los boliches y después, cuando el sol forma parte del paisaje, buscan espacios, como la costa del lago, para continuar consumiendo bebidas alcohólicas.
“Se decidió intensificar los controles en toda la villa para que los turistas y los habitantes permanentes puedan descansar. La orden que recibimos de nuestros superiores es evitar las reuniones después de que los boliches cierren sus puertas”, explicó Tejeda.
El domingo pasado se puso en marcha un plan piloto. Los hombres de la comisaría, reforzado con personal del Cuerpo de Infantería de la Unidad Regional Oeste, se trasladaron hasta la orilla del lago La Angostura para pedirles que se retiraran del lugar. “A la hora, vecinos denunciaron que habían jóvenes generando incidentes en la avenida céntrica. Se desplazó un grupo y se aprehendió a 13 jóvenes”, explicó Tejeda.
El funcionario adelantó además que recurrieron a un nuevo sistema para que su tarea sea más efectiva. “Les pedimos a las personas que nos avisen cuando haya algún tipo de problemas para que lo resolvamos. Pueden llamar al celular 381 537-1005, que también está habilitado para recibir mensajes de WhatsApp o al fijo de la comisaría (3867 49-1301). Las aprehensiones que concretamos el último fin de semana fueron porque una persona llamó”, explicó.
“No estamos en contra de la diversión de los jóvenes, pero deben entender, al igual que sus padres, que no necesitan molestar a los demás veraneantes o generar incidentes para divertirse. Esa es la esencia del operativo Verano Seguro 2020”, concluyó.